En esta era moderna, solemos pensar que la ciencia y la tecnología nos darán todas las respuestas a los misterios del pasado. Sin embargo, hoy vemos con fascinación que estamos muy alejados de esa realidad. Es así, como la lejana Isla de Pascua sigue siendo todo un enigma.
Si bien es cierto se han esclarecido algunas dudas, otras como la llegada de los primeros hombres a tan distante lugar, sigue siendo un dato que goza de poca certeza.
Conociendo más de la Isla de Pascua
Cuando escuchamos sobre esta isla, lo primero que se nos viene a la mente son unas enormes figuras con cabezas gigantes talladas en piedra, pero este lugar alberga muchas otras curiosidades.
Entre sus características destacan sus 163 km cuadrados y que, según la tradición del lugar, el nombre de la isla en realidad es Rapa Nui. El nombre de Isla de Pascua se le debe al explorador holandés Jacob Roggeveen, quien fue el primero en toparse con su existencia mientras intentaba llegar a la Terra Australis, continente que según las leyendas equilibraba las tierras del Hemisferio Norte. Ese domingo 5 de abril de 1722, era domingo de Pascua de Resurrección, por lo que bautizó así a la isla.
Pero quizás lo más sorprendente de este lugar es su ubicación en el Océano Pacífico Sur, al extremo oriental del conocido Triángulo de la Polinesia. Sin embargo, lo que la hace especial es que se encuentra realmente alejada de otro punto de tierra, así su punto más cercano a Chile continental se localiza a 3.526 km. Mientras que al oeste, se encuentran las islas británicas Pitcairn, a unos 2.075 km.
La anterior descripción ha hecho que, durante siglos, más de uno se pregunte cómo llegaron los primeros humanos a esta isla tan remota, tomando en consideración que, incluso en el presente se trata de uno de los lugares más remotos de la tierra.
Hasta ahora sólo ha sido posible formular hipótesis, entre ellas, una dice que los primeros habitantes de la Isla de Pascua, fueron los polinesios quienes migraron de las otras islas hasta llegar a Rapa Nui. Otros sostienen que los nativos de América fueron quienes se aventuraron al mar hasta dar con esta isla, por supuesto, primero topándose con los polinesios.
Teorías sobre la población de la Isla de Pascua
Conozcamos algunas de las hipótesis más aceptadas sobre el inicio del asentamiento rapanui, las cuales no han podido ser totalmente probadas ni desmentidas, dejando el origen de esta civilización envuelto en meras suposiciones.
Orígenes según la tradición rapanui
¿Qué mejor manera de iniciar, que conociendo lo que los propios habitantes de la Isla de Pascua saben sobre sus antepasados? De acuerdo a la tradición oral rapanui, los primeros pobladores de la isla habrían llegaron desde la mitológica Isla Hiva, guiados por Hoto Matu’a quien sería el primer ariki o rey.
América como posible origen de los pobladores de la Isla de Pascua
Otras de las teorías que hasta el presente cuenta con muchos seguidores, es aquella que plantea como posible origen de los rapanuis a los amerindios. Uno de ellos fue el explorador noruego Thor Heyerdahl que, para demostrar su hipótesis, en 1947 se aventuró a realizar un recorrido de aproximadamente 8.000 km por el océano Pacífico.
Esto, a bordo de una sencilla balsa artesanal en lo que denominó la expedición Kon-Tiki. La idea era probar que las poblaciones prehistóricas de América del Sur estuvieron involucradas en el asentamiento de la Isla de Pascua.
Su travesía dio como resultado que en efecto llegó a la Polinesia francesa, con lo que era posible llegar a la Isla de Pascua si se partía desde más al sur de américa. No obstante, estudios de genética molecular realizados recientemente, apuntan a conclusiones opuestas, pero tampoco son evidencias certeras.
Según el ADN los rapanuis son de origen amerindio
En la misma línea antes descrita, un equipo de expertos anunció que lograron encontrar evidencias genéticas que apoyaría la hipótesis de contacto entre amerindios y polinesios en épocas prehistóricas.
Se trataría pues de segmentos cromosómicos de origen americano, hallados en pobladores polinesios desde hace unos 800 años, los cuales poseen afinidad genética con poblaciones indígenas actuales habitantes de la región colombiana de la costa del Pacífico. Esta mezcla genética pudo haberse iniciado en las islas de la Polinesia, como Las Marquesas, Mataiva y Mangareva, y continuó hasta que al final se pobló la Isla de Pascua, lo que explicaría la presencia de ADN americano en estas islas.
El descubrimiento más reciente
Como los resultados de las investigaciones no han sido concluyentes, el cómo llegaron los primeros habitantes hasta la Isla de Pascua, sigue siendo objeto de curiosidad. Para quienes afirman que los polinesios fueron los primeros habitantes de esta misteriosa isla, los investigadores han encontrado evidencia que los apoya.
Así pues, un estudio secuenció el ADN de 430 habitantes de diferentes islas del Pacífico sur. De esta manera, los científicos compararon las huellas biológicas existentes entre las islas, lo que permitiría determinar el momento en que se dividió el genoma, marcando la fecha de cuándo convivieron por última vez estas poblaciones.
Según los resultados de las primeras investigaciones, las migraciones de los habitantes polinesios se dieron entre el siglo IX y el XIII en una ruta de oeste a este. En este sentido, se iniciaría en Samoa y de allí al sureste, lo que permitió a los aventureros llegar a las Islas Cook, Rarotonga, en el 830.
El viaje continuaría hasta las Islas de la Sociedad y ya para el año 1.110, la población se extendería al archipiélago de Tuamotu (actualmente parte de la Polinesia francesa). A partir de este momento, comenzó una nueva oleada de migraciones hacia las Islas Marquesas, finalizando en la Isla de Pascua.
Evidencias de un largo recorrido
Como es conocido, una de las características más llamativas de la Isla de Pascua, son los moai. Este es el nombre de las estatuas de piedra gigantescas que se pueden hallar en este lugar y significa, “el rostro vivo de nuestros ancestros”.
Para los rapanuis, los moai preservaban la energía de los muertos, lo que denominaban el mana. Esto protegía a la tribu y podía manipular las cosechas, los cultivos y animales. Pues bien, según los investigadores, el arte de tallar las piedras se les debería a los habitantes llegados desde la Polinesia. Así lo demostraría un texto tallado en roca, el cual cuenta la expedición del rey Hotu Matu´a (al que ya habíamos mencionado más arriba). En esta narrativa, se presenta a un rey preocupado por volver a su tierra nativa, para buscar una escultura de piedra de vital importancia en la nueva isla.