En un día caluroso, un día de playa, celebración o en una reunión con amigos no puede faltar la reina de las bebidas espirituosas, sí, la cerveza. ¿Pero alguna vez se han preguntado desde cuando esta bebida ha estado presente entre nosotros? O ¿A qué se debe que existan tantas variedades?
Estas y más curiosidades de la cerveza se las contaremos a continuación.
¿De qué está hecha la cerveza?
Disfrutamos de su sabor y frescura, pero muy pocas veces nos detenemos a analizar los ingredientes y el proceso de elaboración de la cerveza. Para iniciar, podemos decir que es una bebida a base de malta dulce o fermentada, que además, debe parte de su sabor característico al lúpulo. En este sentido, se destacan como sus ingredientes principales: la cebada germinada, secada y tostada, el lúpulo que le aporta su aroma amargo, la levadura para su fermentación y agua pura, estéril y potable.
Ahora bien, para llegar a la cerveza que conocemos hoy en día y dar con estos ingredientes, esta bebida ha evolucionado desde sus inicios. Hagamos un breve repaso desde la cerveza de la antigüedad hasta la que nos acompaña en nuestras fiestas.
Evolución de la cerveza
Sobre el origen de la cerveza, se debe decir que es una de las bebidas alcohólicas más antiguas de la humanidad. Si bien es cierto no existe una fecha exacta donde ubicar la primera cerveza de la historia, algunos hallazgos arqueológicos dan cuenta de una bebida fermentada a base de cereales que data del año 3.300 A.C. aproximadamente.
Veamos cómo ha evolucionado la cerveza a través de los años.
Los Sumerios
La historia de la cerveza está muy ligada a la de la agricultura, pues su principal ingrediente, proviene de esa capacidad del ser humano por cultivar cereales. En cuanto a su descubrimiento, los expertos señalan que pudo producirse de forma accidental, cuando se mezcló agua con cereales hasta la fermentación.
Independientemente de cómo sucedió la primera mezcla, la receta escrita más antigua de la que tenemos noticias, y que prueba la existencia de la cerveza, fue encontrada en el pueblo sumerio, en Oriente Medio. En este lugar se localizaron unas pequeñas piezas de arcilla donde se mencionaba el licor, las cuales fueron datadas el 4.000 A.C.
Se conoce que su preparación estaba especialmente a cargo de las mujeres y era bastante común.
El antiguo Egipto
Los antiguos egipcios la llamaban ‘zithum’ y fueron responsables de perfeccionar la receta, aunque empleaban para su elaboración, en lugar de cebada, una variedad de trigo llamado espelta. Para esta civilización, la cerveza como el pan, era indispensable para su dieta básica. Tan es así que, llegaron a industrializarla, produciendo cerca de 4 millones de litros por año.
Además, se sabe que serían ellos los primeros en comercializar con esta bebida, pues la usaban como moneda de cambio e incluso sería parte del pago de sus trabajadores.
Grecia
Para los griegos la cerveza era una bebida egipcia, de quienes adoptaron los métodos y recetas para su elaboración. Sin embargo, para ellos la bebida predilecta era el vino, mientras la cerveza era popular entre las clases bajas que no tenían acceso al vino.
En contraste con los griegos, los pueblos germánicos y escandinavos, le dieron una buena bienvenida la cerveza. Especialmente, por su aporte calórico, pasó a formar parte de su dieta.
Roma
Por su alta influencia griega, los romanos adquirieron su particular amor por el vino y la cerveza, a la que conocían con el nombre de cerevisia, la consideraban un bebedizo de los pueblos bárbaros.
Edad Media
Los bárbaros triunfaron y extendieron el consumo de la cerveza hacia el norte de Europa, alcanzando en el siglo IX un gran auge. No obstante, los monasterios serían los responsables de la auténtica producción cervecera, ya que contaban con los ingredientes cultivados en sus tierras y el conocimiento para su producción.
Fue en este punto donde se perfeccionaron las recetas y métodos, siendo un importante aporte el hecho de que se descubrieron las propiedades conservantes del lúpulo, con lo cual se podía almacenar por mayor tiempo la cerveza. Adicionalmente, se detectó que este nuevo ingrediente le proporcionaba un aroma y sabor ligeramente amargo, así como más estabilización a la espuma.
La cerveza Lager
Una vez más los monjes, esta vez de Baviera, aportaron importantes avances en la industria cervecera durante el siglo XVI. Así, con el descubrimiento de la baja fermentación surgen las cervezas Lager.
Todo inició con una prohibición del duque de Albercht V, para la fabricación de cerveza entre los meses de abril y septiembre. Por lo que los monasterios de Baviera almacenaron cervezas fermentadas en bodegas subterráneas “lagered” durante el invierno. El resultado fue un fermento más claro, limpio y estable.
Estilo Pilsen
Una cerveza dorada y transparente nació en el año 1842, de la mano del maestro cervecero Joseph Grolle, quien deseaba conseguir una cerveza que compitiera con las lagers oscuras.
Así, a través de un control de temperatura durante el malteado, obtuvo un color dorado y, gracias a la selección de ciertas cepas de la levadura, alcanzó un nivel de fermentación que aportaba mayor transparencia. Surgió de esta forma el estilo pilsener, nombre que debe a la ciudad de Pilsen donde fue elaborada, llegando a ser uno de los estilos más consumidos en el mundo.
La Revolución Industrial
La Revolución Industrial originó grandes cambios en la producción de la cerveza. De esta manera, la dimensión de producción fue mucho más ambiciosa, dando inicio a las primeras grandes industrias a nivel mundial.
Fue así como la cerveza se popularizó muchísimo, gracias a las comunicaciones, avances científicos, el empleo del ferrocarril y la microbiología, con su aporte sobre la naturaleza de las levaduras. No podían pasar por alto, innovaciones en el envasado y la refrigeración, que hicieron posible la producción durante todo el año.
En la actualidad
Toda esta industrialización, avances científicos y tecnológicos, harían de la producción de cerveza fabricada a gran escala una norma mundial. No obstante, en el Siglo XXI parece estar dando pie a un renacimiento de la pequeña industria cervecera, con las llamadas cervezas artesanales, recuperando así su calidad, exclusividad y tradicionalidad que había perdido desde hacía mucho tiempo.
Algunas curiosidades sobre la cerveza
No podíamos terminar sin dejarles algunos datos curiosos de esta amada bebida.
¿Sabían que la cerveza tiene un día para celebrarla? Pues sí, el Día Internacional de la Cerveza se celebra los 2 de agosto.
Existen aproximadamente seis tipos de cervezas, como ya señalamos, pero a lo largo de la historia se le fueron agregando ingredientes o modificando los métodos de elaboración. Como consecuencia ahora tenemos las variedades: Lager, Pilsen, Abadía, Gueuze-Lambic, Blanca, Ale y Stout.
Si alguna vez, leyendo la Biblia se les cruza el término “shekar”, se están refiriendo a la cerveza y ese nombre era el que recibía el grano con que se fabricaba.
